A lo largo de la historia, la gota se ha asociado al consumo excesivo de alcohol y alimentos ricos. Este estilo de vida sólo podía permitírselo la élite de la sociedad. En el pasado, sólo los reyes y su leal familia podían permitirse todos los manjares cárnicos y beber todo el mar cargado de alcohol. Desarrollaron ataques de gota a una edad temprana. Al final de sus vidas se volvía crónica y aguda, lo que les acarreaba otros problemas de salud, como cardiopatías y enfermedades renales. Algunos...